- Lo principal, elegir el sistema de descanso adecuado de acuerdo a sus parámetros morfológicos.
- Tomar la postura correcta a la hora de dormir.
- Crear el ambiente propicio: iluminación tenue, olores agradables, evitar los ruidos estridentes...
- Crear una rutina horaria.
- Cuando se sufren episodios de estrés o ansiedad, realizar ejercicios de relajación antes de
acostarnos.
- El ejercicio físico en nuestro día a día contribuye a liberar tensiones y preparar el cuerpo para el descanso.
- Evitar el consumo de alcohol, tabaco, cafeína y otros estimulantes.
- Cenar dos horas antes de ir a dormir evitando ingestas copiosas.
|
|